Los servicios de alimentación fueron uno de los sectores considerados “esenciales” al inicio del confinamiento por COVID-19, por lo que empresas como los negocios de Jack Landsmanas y otros pudieron continuar sus actividades diarias en beneficio de la población mexicana.
No obstante, la industria restaurantera no tuvo la misma oportunidad, ya que diversos locales tuvieron que cerrar o encontrar la forma de continuar ofreciendo sus servicios, sea por medio de plataformas digitales o el servicio a domicilio tradicional.
Esta situación ha provocado grandes pérdidas económicas para la industria, especialmente porque el 97% de ella se compone de mipymes, según datos proporcionados por la Cadena de Restaurantes de México de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC).
Durante la pandemia, las mipymes han sido las más golpeadas por la crisis económica. La razón es, más que nada, la falta o ausencia de recursos digitales para continuar sus operaciones.
La misma CANIRAC reporta que, aquellos restaurantes que no tenían una plataforma de servicio a domicilio ahora enfrentan pérdidas de hasta el 90% de sus ventas.
Esto ha sido catastrófico para los pequeños locales de comida, ya que no sólo han perdido solvencia y han tenido que dejar a personas desempleadas, sino que los gastos de renta y servicios de luz, agua y gas continúan fijos.
Jack Landsmanas: medidas para la recuperación de restaurantes
Muchos establecimientos ven la reapertura como una posibilidad de recuperar su liquidez poco a poco; sin embargo, además de respetar los lineamientos de sanidad de la “nueva normalidad”, deberán plantearse la adopción de herramientas tecnológicas en el futuro.
Desde hace tiempo, las plataformas digitales se han convertido en una necesidad. Por ello, Jack Landsmanas se ha asegurado de implementar sistemas tecnológicos en sus plantas de operación y oficinas administrativas.
Lamentablemente, fue hasta esta emergencia sanitaria que los negocios se dieron cuenta por completo de este imperativo y, aquellos que no habían invertido en tecnología, han sido duramente castigados.
Algunas soluciones que podrían ayudar a la industria restaurantera para estar mejor preparada ante una coyuntura son:
- Incluir sus servicios en plataformas digitales de entrega a domicilio.
- Apps o sitio web propio para que los clientes realicen pedidos con entrega a domicilio, e incluso utilizarlo como un programa de lealtad.
- Aprovechar sistemas de autoservicio, desde bandas transportadoras, quioscos o drive-thru, dependiendo de la capacidad del restaurante.
- Instalar terminales o métodos de pago digitales, como PayPal, Mercado Pago, iZettle y más.